Las piscinas se sitúan en una zona sin consolidar de la localidad de Villanueva de Duero. La disposición y organización del edificio, los vasos de las piscinas y las zonas de estancia dentro de la parcela están determinadas por la forma de la misma, por la situación de la calle de acceso y la previsión de posibles ampliaciones futuras de las instalaciones. El programa y funcionalidad responde a un modelo normativo determinado por el número de habitantes de la localidad. El edificio de vestuarios se sitúa en la zona de entrada a la parcela, paralelo a la calle de acceso aún sin consolidar, integrándose en la misma, pero con una imagen singular como corresponde a un edificio público de estas características. La cubierta es plana y en la entrada se proyectó la plantación de un ciprés, para singularizar la presencia de la instalación dentro del entorno. El guardarropa se utiliza como rótula de unión entre los dos edificios de los vestuarios, destinados a mujeres y hombres, que se han dimensionado en función del modulo de cabina. Como en el resto de las piscinas proyectadas, la transición entre el exterior de acceso y la zona de los vasos se produce a través de una serie de espacios de distintas escalas y distintos grados de iluminación natural. Estructura de hormigón y muros encalados en el exterior permiten un fácil mantenimiento. En el interior, paramentos alicatados en azulejo, pavimentos continuos de hormigón pulido y carpinterías de madera de pino, permitirán también un fácil y barato mantenimiento.